Educación en Salud
La anticoncepción, o control de la natalidad, es el término que se utiliza para designar las técnicas orientadas a evitar el embarazo. Actualmente, forma parte primordial de la planificación familiar; la cual se considera un derecho, esencial a la dignidad humana. Todas las parejas tienen el derecho de decidir libre y responsablemente sobre el número de hijos que desean, con qué frecuencia y el momento más adecuado para tenerlos; derecho a tener la información y los medios para poder obtenerla y el derecho a llevar una vida sexual segura y satisfactoria. Todos estos derechos están implícitos en el concepto de salud reproductiva. Los métodos anticonceptivos constituyen el instrumento para lograrlo.
Existen numerosos métodos para evitar un embarazo: el “coitus interruptus” (retirada), la administración de medicación hormonal, los dispositivos contraceptivos (barreras), los periodos de abstinencia sexual y la cirugía. No obstante, estos métodos no tienen el mismo grado de fiabilidad.
Es importante señalar que ningún método de control de la natalidad protege totalmente frente a la infección por VIH u otras enfermedades de transmisión sexual. Los métodos anticonceptivos pueden ser muy fiables para evitar un embarazo, pero ello no significa necesariamente que ofrezcan esta protección. El único método anticonceptivo que ofrece protección contra el VIH es el preservativo, siempre que se utilice de manera correcta.
La desinformación y los conceptos equivocados respecto a este tema generan que alrededor del mundo, el embarazo no deseado siga planteándose como un problema muy importante, que afecta particularmente a grupos vulnerables, como por ejemplo los adolescentes. Es un derecho del paciente recibir correcta información acerca de métodos anticonceptivos y poder elegir libremente.